Benditos los besos que perdí,
por no saber decir a tiempo que sí.
los rezos en las hermitas del deseo,
donde se arrodillarán los no ateos.
bendito ese dulce tormento,
los lunares de tu espalda,
!benditos tus huesos!.
tu corazón que dejará huella en mi escote.
que sostienen este corazón que se purga ya del dolor.
tu cuerpo pegado a mi espalda.
que derramarás sobre mi lienzo.
Bendita yo....que amaré otra vez,
y bendito tú .......que me amarás.