en ellas puedo amarte si quiero,
también puedo adorarte si así lo deseo
y a la vez apartarte y olvidarte.
Solo yo escribo el guión
de este cuento sin fin, sin cordura ni razón,
de esta locura de almohadas y rincón,
no dejo que nadie interfiera,
yo soy mi mejor consejera.
Un día te convierto en el mejor de los amantes
y te elevo por encima de los cielos,
otras veces te convierto en un adorable canalla
y te arrastro a las tinieblas del infierno.
Pero hoy, hoy no podría pronunciar
tantos verbos infinitos que hablasen de ti….
Pues hoy, mi piel desnuda te aguarda…
y sería imposible drogarte de mi éxtasis, de mí.
Hoy he decidido ser la boca callada que mata
y la lengua que apaga todo tu fuego…cuando ardes y me atrapas.
Convertirme en la mujer que te haga el amor a través de las palabras,
hacerme arruga de tu risa,
y rescatar de lo más profundo de mi boca
tu aliento y tu mirada.